Se trata de un problema que en Uruguay empezó a hacerse conocido en la población hace dos años. En el país no hay cifras oficiales de cuántos lo padecen. El Nidcd señala que es entre el 6 y 7 por ciento de los niños en edad escolar.

El trastorno específico del lenguaje también se conoce como trastorno del desarrollo del lenguaje, retraso en el lenguaje o disfasia de desarrollo. Es una de las discapacidades del aprendizaje más comunes durante la niñez.

En Artigas los padres de los niños que sufren este problemática se unieron para mejorar la calidad de vida de los pequeños.

La Asociación de Apoyo a las Personas con Trastorno Específico del Lenguaje del Uruguay (APTELU) está integrada por familiares de niños y jóvenes con TEL, en Artigas hace más de un año que funciona.

El próximo 30 de septiembre se realizarán jornadas de aprendizaje y recreativas sobre el tema en todo el pais.

en A los dos años, el niño debería ser capaz de armar frases cortas del estilo “mamá”, “agua”, “quiero jugar”. “Hay simplificaciones fonológicas (o sea omitir sonidos o cambiarlos) que son normales en niños pequeños y que no significan trastorno. Si las realizan aún a los 4 o 5 años ya habla de un problema”, indicó Camaño.

El desconocimiento del trastorno hace que muchísimos niños no estén diagnosticados. En algunos casos, los médicos los definen como disléxicos o autistas. “En el peor de los casos puede pasar desapercibido. Y pasan por la escuela que son burros y son vagos, pero en realidad tienen un trastorno”, indicó Natalia Neves, presidenta de la Asociación de Apoyo a las Personas con TEL del Uruguay (Aptelu).