Termómetros que se dispararán por el día y no darán tregua por la noche.
El calor va a seguir por lo menos hasta el viernes. Estamos hablando de máximas que van a estar alrededor de los 35 grados,con sensaciones térmicas mas elevadas.

Prevención en niños

Prevenir cualquiera de las complicaciones derivadas de la exposición a estas altas temperaturas es fácil siguiendo una serie de sencillos consejos.

1. Durante estos días, debemos evitar salir a la calle con los pequeños en las horas más calurosas. Si no hay más remedio que hacerlo: gorra o sombrero en mano, vestidos con ropas ligeras de colores claros y tejidos naturales, protección solar en las zonas expuestas y bien cargados de agua fresquita, o de la teta de mami si estamos con lactancia materna. No olvidemos permanecer a la sombra siempre que sea posible,Y nunca, por mínimo que nos parezca el tiempo, se debe dejar a un niño solo dentro de un vehículo expuesto al sol

.2. La protección solar en los niños deberá ser siempre muy alta (FPS +50) y efectiva frente a todos tipos de rayos solares nocivos: UVA, UVB e infrarrojos. Se evitará la exposición directa al sol de los menores de 3 años. Y, sea cual sea la edad, nada de ponerse al sol entre las 11 y las 16 horas. Importante también proteger los ojos con unas gafas de calidad que garanticen la absorción de los rayos ultravioletas, previniendo así futuros problemas oculares.

3. Cuando estemos en casa, es conveniente cerrar las persianas Se debe tratar de permanecer en la estancia más fresca de la casa, conectando el aire acondicionado si disponemos del mismo, y realizando actividades que no requieran gran esfuerzo físico.

4. Es fundamental mantener una buena hidratación, ofreciendo y bebiendo agua a menudo, aunque no se sienta sed. Evitar las bebidas muy azucaradas, pues van aumentan la pérdida de líquidos, así como las bebidas muy frías. Para comer, aumentaremos el consumo de frutas de verano y verduras frescas, que nos ayudarán a mantener una buena hidratación y recargarán el cuerpo de las sales minerales perdidas a través del sudor. Las comidas copiosas y muy calientes se deben evitar. Y tendremos especial precaución a la hora de conservar los alimentos, pues el calor favorece la proliferación de bacterias que podrían causar infecciones alimentarias, algunas de ellas graves.

6. Durante las horas de más calor es conveniente refrescarse a menudo y evitar realizar ejercicio físico intenso. Para los afortunados que disponen de un lugar abierto donde poder remojarse, mantener siempre a los niños bajo la vigilancia de un adulto.

7. Si su hijo está tomando algún medicamento, consulte cómo se debe de conservar para garantizar unas condiciones óptimas de la mismo. Todos los años, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) publica en su página web recomendaciones al respecto.

8. En caso de niños con enfermedades crónicas, se deberá consultar con su médico o enfermera del Centro de Salud si aparecen síntomas no habituales.

Pero mientras los humanos podemos tomar medidas ante este exceso de calor, lo cierto es que unos de los más afectados son nuestras mascotas, quienes se exponen en esta época del año y que sufren enfermedades importantes, a los que hay que estar muy atentos.
Nuestras mascotas deben tener protección del sol, no quedar expuestos a altas temperaturas incluso en su patio y menos dentro de un vehículo, recordando además que siempre deben tener una fuente de agua limpia disponible