El presidente de ANTEL Andrés Tolosa explicó a los cambios que rigen en los contratos a partir de este lunes 1° de enero de 2018.
El primer día del año comenzó con dudas y una molestia generalizada por los cambios en la forma de utilizar el monto del contrato, tanto en llamadas, mensajes o consumo de datos (Internet).
ANTEL informó que ahora el monto del contrato se podía utilizar en llamadas y mensajes, «o» en el consumo de datos, dando a entender que el cliente debía optar por gastar el dinero pago de una u otra forma.
Así lo explica en su página web.
Esto llevó a los clientes a preguntar dónde y cómo había que hacer uso de esa elección, lo que en verdad no es necesario.
Tolosa reconoció a Subrayado que hubo “errores” en la comunicación de las novedades, tanto en los mensajes que algunos recibieron diciendo que ya no tenían saldo de datos, como aquellos mensajes que pedían recargar dinero para poder continuar conectados a Internet. «Eso fue un error y lo vamos a corregir», aseguró.
¿CÓMO ES ENTONCES? Antes, recordó Tolosa, un contrato tenía una capacidad paga de datos determinada, por ejemplo 2, 3, 4 Gigas, o más.
Cuando a uno le sobraban minutos de llamadas y mensajes, podía cambiarlos por más Gigas y así tener más capacidad de navegar por Internet. Esto ahora no es necesario.
El beneficio, explicó Tolosa, es que ahora se puede utilizar el monto total del contrato de forma indistinta entre llamadas, mensajes y datos (Internet).
No hay que optar entre llamadas, mensajes o datos. A medida que se hacen las llamadas, se envían los mensajes, o se usa Internet, el costo de cada operación se descuenta del monto total del contrato.
Por ejemplo, si uno tiene un contrato de 1.000 pesos, se irá descontando de allí el costo de cada llamada, de cada mensaje y de cada consumo de datos.
Esto quiere decir, destacó Tolosa, que si antes uno tenía en su contrato solo 2 Gigas -por ejemplo- pero quería usar más datos, debía recargar. Ahora no. Utiliza tantos gigas como pueda dentro del contrato que ya pagó.
Si hace menos llamadas tendrá más espacio para usar Internet y viceversa, cuanto más llamadas haga, menos monto le quedará para datos. Todo depende de cómo lo utilice cada uno. La ventaja -dice Tolosa- es que no hay que optar ni recargar nada. El consumo se distribuye como cada uno quiera dentro del monto de su contrato.
Un cliente que hace pocas llamadas tendrá entonces más capacidad de usar datos que antes, sin hacer nada, esto es: sin recargar ni pagar más.
CONTRATOS CON Y SIN LÍMITES. Ahora bien. Hay contratos con límite y otros sin límite. En los contratos con límite, si un cliente se pasa, debe recargar para poder seguir hablando o navegando por Internet.
En cambio, en los contratos sin límite, si uno se pasa del monto pago (por ejemplo los 1.000 pesos del contrato original) podrá seguir haciendo llamadas y navegando por Internet sin problemas, y pagará cada llamada o consumo de datos extra al mismo precio que en el contrato original.
“Esto es un beneficio que antes no estaba”, destacó el presidente de ANTEL a Subrayado. Antes se pagaba más caro el minuto o consumo extra por fuera del contrato. Ahora saldrá lo mismo.
MENSAJES. Respecto a los mensajes de texto, Tolosa recordó que en realidad no hay límites porque son hasta 10.000 mensajes por mes en todos los contratos, y nadie los utiliza todos. De hecho cada vez se mandan menos SMS. Por eso, el monto del contrato ahora se podrá utilizar de forma indistinta entre llamadas y consumo de datos.
Fuente SUBRAYADO