Cristian Olivera lleva adelante un emprendimiento familiar. Junto a su esposa y cuatro hijos cocinan pizzas con un horno casero que construyó durante la pandemia cuando había perdido bastantes trabajos, ya que se dedica a la albañilería. Actualmente, su humilde puesto está ubicado en el Centro Poblado Pintadito, junto a él cuando lo visitamos estaba su pareja que es quien lo acompaña diariamente mientras Cristian cocina las exquisitas pizzas. También nos dijo que sus hijos habitualmente colaboran y comparte juntos esta oportunidad laboral. “Poco a poco vamos a ir mejorando la atención”, enfatizó, agregó que primero vendía puerta a puerta, un día decidió salir con su horno móvil a la calle donde comenzó a vender un poco más. Lamentó que no cuenta con locomoción propia para poder trasladar el “local móvil” a otras zonas. «Estamos generando para la olla», sentenció. Contacto: 092494387